Si estás buscando algún panorama que te conecte con la naturaleza, pero que no implique alejarse demasiado de la ciudad, el Salto del Claro es el lugar perfecto.
Con una vista hermosa y un acceso de baja dificultad, el Salto del Claro recibe a miles de visitantes cada año. La caída de agua casi alcanza los 90 metros de altura y se encuentra ubicada en medio de un bosque nativo, a tan solo seis kilómetros del centro de la ciudad.
Si vives en Pucón o has llegado a vacacionar, contemplar la cascada es una experiencia que no te puedes perder. Además, el camino hacia el atractivo natural expone toda la belleza de la flora y fauna local, escenario que hace del paseo algo ideal para los amantes del aire libre.
Aclarar que la visita al lugar no es recomendada para personas con problemas de movilidad, ya que el acceso a los miradores incluye una bajada con cierto grado de dificultad que puede estar con lodo dependiendo de las condiciones climáticas recientes.
Existen dos vías para ingresar. Una entrando por pasaje Los Calabozos y otra a través del Parque Salto del Claro, este último permite realizar actividades como caminatas por los senderos a la cumbre del cerro San Francisco, entre otros.
Una experiencia turística que no te ocupará más de medio día y que no olvidarás jamás.