En cerca de 20 mil personas cifra la municipalidad la concurrencia a la fiesta de fin de año que se realizó en la comuna. La celebración, animada por Giolito y su Combo, duró hasta casi las 2 de la mañana. Los asistentes mostraron poca preocupación por la limpieza y las botellas de vidrio, entre otros elementos, regaron el piso. De poco sirvieron los llamados a no usar confeti y en el lugar no se vio mucho control de su venta. La suma de eventos privados en los alrededores produjo además un posterior atochamiento en el centro que provocó algunos incidentes, pero para vecinos del sector, esta fiesta tuvo un balance positivo y se vivió una celebración ciudadana que, más allá de los inevitables, se desarrolló sin grandes inconvenientes y en orden.
Para Shirleyd Garrido de “Picá Campesina” es inevitable que cuando se junta mucha gente quede basura, pero afortunadamente no tuvo ningún problema tan grave como los del año anterior en que su terraza quedó destruida. Esta vez, eso sí, debieron quedarse cuidando el local para poder resguardarlo. De todas formas, recalca que si se habría cumplido con las medidas de seguridad.
Shileyd nos cuenta que las vallas papales que se instalaron fueron abiertas por la misma gente que en su afán de pasar de un lado a otro no tuvieron consideración con estas instalaciones. Efecto también del alcohol que habrían consumido, algunas personas trataron de ingresar a la terraza de su local lo que afortunadamente pudieron impedir. “Eso es lo que más cuidamos porque el año pasado se destruyó completa, este año no […]. Teníamos que estar nosotros mismos, los guardias que puso la municipalidad, la verdad, en este sector no estaban, pero si estaban las rejas”.
En cuanto a la cantidad de basura dice que no hay mucho que hacer al respecto y es la gente la que es sucia y no cuida los espacios. “No se llevan su basura, dejan más basura. Muchas personas estaban vendiendo lo que está prohibido, los confeti. Todo ese cotillón se vendía a diestra y siniestra en la calle”. Desde DAOMA informaron que tras su operativo de limpieza en el sector centro se recogieron más de 22 toneladas de residuos de los cuales aproximadamente 10 son solo de vidrio. Para Shirleyd Garrido esto es parte de una falta de conciencia de parte de las personas “Las personas no cuidan, no hay una cultura del reciclaje, del orden, de ser empático con su entorno”. Pese a todo esto afirma que no tuvieron grandes problemas para abrir el primero de enero y su principal preocupación fue la cantidad de botellas rotas y otros elementos que podrían haber provocado algún accidente a sus clientes. Finalmente insiste que fue mucho más ordenado que el año previo.
En cuanto al flujo vehicular, durante el transcurso de la noche y, por sobre todo, tras el cierre del show, se provocó una gran congestión por las calles céntricas de la comuna debido a la enorme cantidad de asistentes que recibieron las distintas actividades públicas y privadas que se ofrecían. Esto provocó un atochamiento de al menos una hora que hizo muy lento el trasladarse en vehículo por Pucón centro y que junto al alcohol causó algunos incidentes menores. “La cantidad de autos que ingresaron al centro ocasionaron congestión y muchas colisiones de autos. Nosotros fuimos a ver al sector de la plaza donde está el casino […] había 10 carabineros y todo el mundo peleando.” Nos cuenta Shirleyd.
Luego de la experiencia del inicio de 2023, los locatarios estaban más preparados para lo que podría pasar por lo que se tomaron las medidas necesarias. Esto ayudó que, para ellos, la fiesta transcurriera de forma principalmente tranquila. Shileyd Garrido entiende que es importante realizar estas fiestas para la gente y sabe que ante eventos de este tipo van a ver impostergables como la basura en las calles y algo de desorden, por lo que están tranquila con que se haya aprendido de la ocasión previa para minimizar los daños de cara a esta celebración que finalmente termina con un balance positivo.