El 2 de abril es el Día Mundial de la Concienciación sobre el Autismo, cuyo objetivo es visibilizar y abordar las problemáticas que enfrentan las personas con trastorno del espectro autista (TEA), promoviendo sus derechos políticos y sociales.
El TEA es una condición que impacta en la forma de pensar, comportarse, comunicarse e interactuar socialmente con las personas, es por esto que se busca generar instancias de sensibilización para la ciudadanía con la finalidad de que la sociedad conozca las expresiones del autismo y empatice con las personas del espectro y sus familias. De esta manera se contribuye a mejorar la calidad de vida en todas sus dimensiones y generar oportunidades de participación en igualdad de condiciones.
Durante los primeros hitos del desarrollo, en el ámbito escolar, comienzan a surgir dificultades más significativas para los y las estudiantes con autismo, las cuales marcarán tanto su desarrollo personal, bienestar emocional, autonomía e independencia. Esto se debe a la falta de conocimiento sobre el autismo y a los falsos mitos que aún perduran sobre esta condición. Por lo tanto, es relevante destacar la importancia del abordaje terapéutico a temprana edad, donde estudiantes y sus familias puedan recibir los apoyos necesarios acorde a las dificultades que presentan en diferentes contextos a lo largo de sus vidas.
La comunidad educativa cumple un rol fundamental a la hora de promover y garantizar los derechos de los y las estudiantes, además de generar instancias que aporten a la inclusión, comprensión de necesidades de apoyo, fortalezas y habilidades de las personas. Esto se puede lograr a través de diferentes estrategias, entre las cuales se destacan: La integración sensorial, el juego, el apoyo conductual positivo, plan de adecuaciones curriculares individualizado (PACI), intervención multidisciplinaria, etc. Como terapeuta ocupacional, hago un llamado a fomentar el respeto a la diversidad en los contextos educativos, ya que, es primordial para prevenir posibles situaciones de abuso y acoso escolar, y también para promover una sociedad en la que las personas con autismo puedan disfrutar como sujetos de derechos.